EL AMOR QUE ME SALVA


Me adentro a través de tus ojos

en un mar en calma

Y se para el tiempo

porque he dejado de envejecer.

El latido de mi corazón suena distinto

y  mi mente se olvida del momento presente

vagando por tus entrañas

y recreándose en cada rincón

como si fuera el último sitio donde pararse.

A vivir me quedo en los valles que voy encontrando

sin mirar y sin pensar en el mañana,

porque todo se relativiza

y se convierte en hormiga estando contigo.

Y cuando la música del momento se va apagando

sueño con la próxima vez,

hasta que te reencuentro cuando me llamas

y tus ojos se hacen cada vez más un pecado

y la adicción me incapacita.

No hay ninguna forma para acabar con esto

que aceptar mi adicción sin querer cura alguna.

Porque es que entonces me moriría.

Sería barca que se aleja sin intención de volver.

La luz la vería a través de un túnel

y entonces me gustaría quizás no haber nacido.

Porque en la misería de tu ausencia 

mi vida habría sido la nada más absoluta.

Comentarios

Entradas populares